Buscando El Reino. Marta Diana. Planeta. /s
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CaracterĂsticas del producto
CaracterĂsticas principales
TĂtulo del libro | Buscando el reino |
---|---|
Autor | DIANA, MARTA |
Idioma | Español |
Editorial del libro | Planeta |
EdiciĂłn del libro | 1 |
Tapa del libro | Blanda |
Volumen del libro | Volumen Unico |
Con Ăndice | SĂ |
Año de publicación | 2013 |
Otras caracterĂsticas
GĂ©nero del libro | ReligiĂłn |
---|---|
Subgéneros del libro | Catolicismo |
ISBN | 9789504933953 |
DescripciĂłn
TĂtulo Buscando el reino
Autor Marta Diana
Año de edición 2013
Páginas 513
ISBN 9789504933953
El 11 de octubre de 1962, convocado por el papa Juan XXIII, comenzĂł el Concilio EcumĂ©nico Vaticano II, considerado uno de los acontecimientos del milenio. Más de dos mil obispos de todo el mundo ocuparon la nave central de la basĂlica de San Pedro para debatir siguiendo la consigna del aggiornamiento: cĂłmo interpretar los nuevos signos de los tiempos para la Iglesia catĂłlica. Entre aquellos obispos se encontraba Helder Cámara, quien promoviĂł intensamente la creaciĂłn de grupos por la defensa de los pobres del entonces llamado Tercer Mundo. Dos obispos argentinos, Alberto Devoto y Enrique Angelelli, fueron protagonistas de aquellas reuniones, que culminarĂan en Roma con la firma del Pacto de las Catacumbas: un compromiso ejemplar de vida humilde en el ejercicio del ministerio puesto al servicio de los desamparados.
La prĂ©dica de sus seguidores fue especialmente fĂ©rtil en AmĂ©rica Latina, donde florecieron iniciativas como el "Manifiesto de los 18 Obispos del Tercer Mundo". La respuesta de los regĂmenes militares, que por entonces dominaban la regiĂłn latinoamericana, produjo una terrible oleada represiva. En la Argentina de esos años, donde unos quinientos religiosos habĂan adherido al Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo, hubo más de cien vĂctimas desaparecidas, siete sacerdotes asesinados y cientos de personas exiliadas, prueba elocuente de que la opciĂłn por los pobres y la lucha por los derechos de los marginados y desvalidos implicaban un destino de martirio.