La Última Cruzada Del Occidente La Guerra Civil Española

Descripción

Escrita y en imprenta ya La Última Cruzada del Occidente Cristiano, nos viene de Roma, Centro de la Cristiandad, el argumento teologal supremo en favor de nuestra tésis: la Guerra Civil Española del 36 fue la mayor persecución religiosa de la Historia de la Cristiandad en 2000 años de existencia.

Este es el significado último acto celebrado en la plaza del Vaticano el 11 de marzo de 2001 protagonizado por S.S. el Papa Juan Pablo II al elevar al honor en los altares, de una tacada, a 223 mártires de la Guerra Civil del 36. Todos ellos fueron asesinados en la Zona roja de la II República, confirmando con ello la realidad histórica indiscutible: la persecución religiosa que transformó la Guerra Civil en Cruzada Nacional en defensa de la Religión y la Patria. De ahí nace la licitud y legalidad de la misma frente al Comunismo internacional ateo, apátrida y antiespañol que quería destruir la Religión y la Patria.

Tanto los mártires de la Zona roja, como los combatientes de la Zona nacional murieron todos, sin una prevariación o apostasía, confesando su Fe religiosa y su Patriotismo heróico. Murieron todos al grito de ¡Viva Cristo Rey! ¡Viva España!

Esta es a realidad histórica que justifica y proclama la exaltación al honor en los altares de esas 233 víctimas del odio satánico de los milicianos rojos de la II República Española del 36. Pero esta verdad histórica no es reconocida, hoy día, por muchos historiadores, empeñados en crear una nueva leyenda negra en torno a nuestra Guerra Civil del 36. Como ejemplo de esta tendencia ahí está la ingeniosa frase del ilustre historiador español Julián Marías enjuiciando la Victoria indiscutible de Francisco Franco en la Guerra Civili: es "la derrota justa de los vencidos y la victoria injusta de los vencedores". Con lo cual se ofende por igual a los "rojos" y a los "nacionales". Pero sobre todo se ofende a la verdad histórica que todos deben asumir y respetar.

Nosotros defendemos esa verdad histórica con razones y con hechos incontrovertibles. El inteligente lector podrás apreciarlo si se asoma a las páginas de esta auténtica Defensa de la Cristiandad que viene a desentrañar la Guerra Civil Española del 36.