Lonicera Caprifolium Belgicae (madreselva Rosada)
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Características del producto
Características principales
Nombre de la especie | Madreselva rosada |
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Tipo de planta | Enredadera |
Cantidad de plantas | 1 |
Altura | 150 cm |
Otras características
Ambientes | Exterior |
---|---|
Incluye maceta para planta | No |
Descripción
La Madreselva pertenece a la familia de las Caprifoliaceas. Es una enredadera perenne, de muy rápido crecimiento, originaria de Asia. Se han encontrado cerca de 180 variedades hasta el momento. Crece de manera silvestre en las orillas de los canales de riego, acequias y desagües y trepa por las plantas que estén a su alcance gracias a sus raíces adventicias.
Tiene hojas ovales, opuestas, verdes en la cara superior y verde-azulado o blanquecinas en la inferior. Florece en Primavera y Verano llenando de agradable perfume el ambiente, más intenso aún durante la noche, con él atrae a los insectos que la polinizarán (generalmente polillas). Se multiplica por las semillas contenidas en sus frutos (que tienen forma de baya y un color rojizo), esquejes o acodos (durante la primavera con sólo enterrar una rama que cuelgue se notará que enraizó al cabo de dos semanas, entonces se corta y se transplanta a otro lugar), no es aconsejable para maceta por el gran desarrollo de sus raíces; por esto es que se las considera también como invasivas, al ir consumiendo los recursos orgánicos y el agua de su entorno.
Necesita suelos con buen drenaje, aireados, sueltos, con mezcla de turba, tierra, perlita y arena. Se aconseja ubicarlas en sombra o semisombra. Resiste bien las temperaturas bajas. El riego debe ser regular, aumentándolo durante la época de floración. Si se le efectúa una poda de las puntas a finales del invierno ésta favorecerá un desarrollo más vigoroso luego. Los fertilizantes que más le aprovechan son los que contienen fósforo y potasio. Es resistente a las plagas, pero suelen atacarla los pulgones y las orugas.
No es aconsejable la ingestión de los frutos porque pueden ser tóxicos; con las flores se hacen infusiones que alivian la tos y las hojas, preparadas de la misma forma, actúan como diurético.
Las variedades más comunes cultivadas en los jardines son: Lonicera japonica, de flores blancas que cambian a amarillas al envejecer (su variedad “aureoreticulata” es similar, pero con las nervaduras de las hojas amarillas, lo que las hace más llamativas); Lonicera caprifolium “belgicae”, con flores rojas, rosas y amarillas; Lonicera brownii “dropmore scarlet”, con flores que van del naranja al rojo escarlata y Lonicera heckrotii “Goldflame”, de bellas flores entre rosa y amarillo.