Pagá en cuotas

Llega gratis mañana

Retirá gratis entre el jueves y el viernes en correo y otros puntos

Ver en el mapa

¡Última disponible!

  • 30 días de garantía de fábrica.

Vendido por URSINO LIBROS

MercadoLíder Platinum

+1000

Ventas concretadas

Brinda buena atención

Medios de pago

Hasta 12 cuotas sin tarjeta

Tarjetas de crédito

Tarjetas de débito

Efectivo

Características del producto

Características principales

Título del libro
MELANCOLIA CLINICA Y TRANSMISION GENERACIONAL
Autor
FERNÁNDEZ ATIÉNZAR, CARLOS
Idioma
Español
Editorial del libro
Xoroi Edicions
Edición del libro
1
Tapa del libro
Blanda
Con índice
Año de publicación
2019

Otras características

Cantidad de páginas
320
Altura
21 cm
Ancho
15 cm
Peso
500 g
Material de la tapa del libro
Vinil
Con páginas para colorear
No
Con realidad aumentada
No
Género del libro
Ciencias naturales y médicas
Subgéneros del libro
Psicología
Edad mínima recomendada
14 años
Edad máxima recomendada
100 años
Escrito en imprenta mayúscula
No
ISBN
9788412016604

Descripción

Si la melancolía corre el peligro de perder el estatuto que ha tenido durante tantos siglos, en una época atravesada por el capitalismo, en una época de individuos aparentemente libres y solos, en una época de sobreabundancia de objetos, en una época en que la tristeza es un pecado (pero no lo es tanto estar apático y vacío); en este caso, es el momento más adecuado para hablar de la melancolía, y cuanto más, mejor. El melancólico contemporáneo, si es que existe, tiene muchas dificultades para poder estar triste.

La psiquiatría ha emprendido un retroceso inesperado y ha vuelto al hogar que abandonó en los años setenta: la casa de la neuropsiquiatría. Sin embargo, caben resistencias y el texto de Carlos Fernández lo demuestra a todas luces. Su estudio de las formas clínicas de la tristeza es un balón de oxígeno que mejora nuestro presente. Sin alejarse del todo de la perspectiva psiquiátrica, pues no quiere caer en ningún radicalismo ni dar muestras del mismo dogmatismo que se propone combatir, su apoyo teórico es básicamente freudiano. Este apoyo, básico, esencial, nos devuelve la inspiración necesaria que nunca debió de ausentarse de nuestra interpretación. Al menos si aspiramos a evitar la simplificación de la psicopatología que ahora padecemos.

La idea de la tristeza concebida como un duelo del deseo, como una pérdida de cualquier anhelo, late en esta investigación. Una pérdida o paralización del deseo que se puede producir de dos modos diferentes: ocasionalmente, lo que permite decir de alguien que simplemente está melancólico; o de un modo sistemático, constitutivo o estructural, lo que autoriza a distinguir a quienes son melancólicos en sí, todo el tiempo, y no sólo a los que lo están. Esta última, ese modo de ser, esa melancolía constante, da pie a alguna de las reflexiones de mayor calado que podemos leer en el texto. Una de ellas concurre para preguntarse por la causa que lleva a una persona a sufrir periódicamente estados de inhibición y pérdida de energía mental. Otra, para conocer cómo se transmiten esas ausencias de deseo de generación en generación sin recurrir a la consabida hipótesis genética.

Preguntas y respuestas

Preguntale al vendedor

Tiempo aproximado de respuesta: 33 minutos

Nadie hizo preguntas todavía.

¡Hacé la primera!