Casa De Locos Narradores Latinoamericanos Q Estudian En Usa
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CaracterĂsticas del producto
CaracterĂsticas principales
TĂtulo del libro | Casa de locos. Narradores latinoamericanos que estudian un doctorado en Estados Unidos |
---|---|
Autor | Francisco Laguna Correa (comp.) |
Idioma | Español |
Editorial del libro | Paroxismo |
EdiciĂłn del libro | Primera |
Tapa del libro | Blanda |
Con Ăndice | SĂ |
Año de publicación | 2015 |
Otras caracterĂsticas
Cantidad de páginas | 294 |
---|---|
Altura | 22 cm |
Ancho | 14 cm |
Con páginas para colorear | No |
Con realidad aumentada | No |
GĂ©nero del libro | Literatura y ficciĂłn |
Tipo de narraciĂłn | Cuento |
Edad mĂnima recomendada | 12 años |
Edad máxima recomendada | 140 años |
Escrito en imprenta mayĂşscula | No |
Cantidad de libros por set | 1 |
DescripciĂłn
Casa de locos. Narradores latinoamericanos que estudian un doctorado en Estados Unidos, de Francisco Laguna Correa (comp.). Ed. Paroxismo, México, año 2015. Estado: Nuevo. Cantidad de páginas: 294
Parece un ejercicio frecuente la publicaciĂłn de antologĂas literarias, en particular de poesĂa y de cuento. Una de las razones de este auge es que ambos gĂ©neros son poco atendidos por las grandes editoriales que están enfocadas en la novela. De esta forma los apoyos –cada vez más escasos– del gobierno, instituciones culturales, además de uno que otro proyecto independiente, tienden a apoyar estos esfuerzos no solamente con la producciĂłn de libros sino promoviendo concursos y premios. Uno de los aspectos que me gustan de las antologĂas es que permiten acercarse a una gran diversidad de autores cuya obra puede no cumplir con los estándares de las grandes editoriales pero que cuenta con la calidad suficiente para trascender en el lector y, asĂ, contribuir a la diversidad.
Reseñar una antologĂa de cuentos, en esta ocasiĂłn Casa de locos. Narradores latinoamericanos que estudian un doctorado en Estados Unidos, es partir de varios puntos: el criterio de selecciĂłn, la justificaciĂłn del compilador y, por supuesto, las virtudes y defectos de los cuentos participantes. Desde hace mucho tiempo la palabra “antologĂa” lleva implĂcito el establecimiento de un canon, es decir, fijar una postura, conformar un grupo literario o firmar una propuesta que separa lo valioso de lo prescindible. Con el paso de los años y la dificultad de encontrar grupos de escritores cohesionados en torno a un manifiesto o estĂ©tica, las antologĂas se han transformado en reuniones de amigos que no tienen intereses ni poĂ©ticas comunes. El Ăşnico criterio de encuentro, en el mejor de los casos, es la cercanĂa generacional. Por estas razones muchas antologĂas recientes han buscado contrarrestar esta dispersiĂłn seleccionando los cuentos por temas o subgĂ©neros: cuentos de amor, policiales, de ciencia ficciĂłn, terror y un largo etcĂ©tera.
Casa de locos es un libro que comparte algunos rasgos con esta tendencia. Publicado en Estados Unidos por Editorial Paroxismo, un proyecto independiente que busca dar espacio a autores latinoamericanos que radican en ese paĂs y que escriben en español, el ejercicio se acerca más a una experimentaciĂłn que a la dinámica tradicional de las antologĂas de cuento que se publican en latinoamĂ©rica. El compilador eligiĂł como tema la vida acadĂ©mica, en particular los estudios de posgrado en humanidades en Estados Unidos. Otra singularidad es que los autores convocados son estudiantes o graduados de doctorado en universidades como Texas A&M, Pennsylvania, Nueva York, Pittsburgh, entre otras. Este criterio, que algunos desdeñarĂan, me parece atractivo. A menudo se hace una separaciĂłn entre el mundo creativo y el acadĂ©mico. Incluso, la misma crĂtica literaria que se publica en revistas culturales a menudo es vista como un mero ejercicio de glosa, un comentario que sĂłlo pondera dejando de lado la creatividad, la imaginaciĂłn y demás valores que se le atribuyen, per se, a la escritura creativa. Sin embargo, a pesar de esta percepciĂłn, un simple vistazo a las biografĂas de muchos escritores del siglo xx y contemporáneos nos indica que, a la par de sus trabajos en la ficciĂłn, se desempeñaron en la academia, ya sea por necesidad o por vocaciĂłn. Queda pendiente el análisis, para los crĂticos y la historia literaria, la relaciĂłn entre el trabajo acadĂ©mico y la escritura de ficciĂłn. ÂżCĂłmo se influyen? ÂżQuĂ© herramientas comparten? ÂżUn escritor que se mueve con soltura en una tesis puede, al mismo tiempo, enfrentar otro tipo de escritura y generar un discurso atractivo para un lector diferente?
Entrando en materia, Casa de locos es un libro de cuentos disparejo en calidad y maneras de abordar la temática que propone el editor: escribir acerca de la vida de un estudiante de doctorado en el área de humanidades en Estados Unidos. Esta caracterĂstica me parece valiosa porque, en primer lugar, se aleja de los temas tradicionales en las compilaciones temáticas y, además, refleja una gran diversidad de opiniones y puntos de vista de los autores sobre su contexto universitario. En este libro hay cuentos de corte confesional, anĂ©cdotas Ăntimas sobre la vida de un estudiante de doctorado y, en el otro extremo, historias que tienen su ancla en un territorio imaginativo que toma la vida acadĂ©mica como mero pretexto para elaborar un discurso con intereses más amplios. De los trece cuentos que integran el libro selecciono unos cuantos que, creo, pueden ser ilustrativos para el lector y que trazan un arco que va de textos rudimentarios, sin mucha malicia en su estructura y apuesta, hasta cuentos que cumplen bastante bien con lo que puede exigir un lector avezado. “Taller literario”, de Jorge A. Tapia Ortiz, es uno de los textos más pobres de Casa de locos y su tĂtulo. De hecho, parece una confesiĂłn anticipada que esboza apenas referencias que podrĂan ser el germen de un ejercicio más desarrollado si se aplicaran las lecciones aprendidas en un taller de escritura. Escrito en primera persona, “Taller literario” no crea una historia sino que acumula una serie de reflexiones sobre la decisiĂłn de estudiar un posgrado: los retos escolares y la patria que se deja atrás cuando se viaja al extranjero, entre otras inquietudes. Estos elementos no se concretan en hechos narrativos, pues el autor confĂa en que Ă©stos sean interesantes por sĂ mismos y por eso sĂłlo los nombra. “Llamada”, de Pedro Pablo Salas Camus, es un texto de factura similar. AquĂ, el autor tambiĂ©n emprende una recolecciĂłn de pensamientos sobre las ventajas y desventajas de estudiar un doctorado en Estados Unidos. No hay una idea narrativa, descripciones ni historia a seguir. Algo que exhibe la falta de oficio en estos dos autores es la ingenuidad con la que abordan sus trabajos. Parece que para ellos resulta suficiente nombrar experiencias sin rodearlas de una atmĂłsfera, diálogos, planos narrativos, secuencias, entre muchos otros elementos.
Hay otro grupo de cuentos que rompe la estructura clásica del gĂ©nero. El menos logrado de ellos, aunque interesante en la propuesta, es “God fearing country”, de Betina González, que en la portada del libro se anuncia como un “epĂlogo” aunque sea, en realidad, un texto más que cierra la compilaciĂłn. Este cuento, que tiene mucho de crĂłnica o artĂculo de revista, es una pequeña radiografĂa de la cultura norteamericana. Desde la voz del extranjero que ya se ha aclimatado a su nuevo hogar aunque sin perder una dosis saludable de extrañeza, se describen las ambigĂĽedades del american dream para, inmediatamente despuĂ©s, ofrecer una serie de noticias excĂ©ntricas ocurridas en diversas partes de Estados Unidos: un gato que predice quiĂ©n va a morir en un asilo de ancianos; una mujer de 92 años que dispara a la casa de su vecino porque le negĂł un beso. El texto funcionarĂa mejor si la parte ensayĂstica fuera más extensa o se justificaran de mejor manera los hechos raros que enlista. Otro cuento experimental es “Guisantes y gasolina”, de Dayana Fraile. Sin recurrir a una historia lineal sino ofreciendo trazos e instantáneas de sus vidas, la autora plantea la relaciĂłn entre dos mujeres. Usando el devaneo y el recuerdo, se eslabona un discurso ágil e imaginativo que crea una atmĂłsfera seductora.
Otro cuento destacado es “Pensando en Prado”, de Ulises Gonzalez. Quizás, de todo el conjunto, es el más tradicional en cuanto a lenguaje y estructura. Con una prosa directa, se cuenta la historia de un estudiante peruano que, despuĂ©s de trabajar como asesor de Prado, un personaje influyente en Lima, viaja a Estados Unidos. Mediante los recuerdos del estudiante, nos enteramos de su malograda relaciĂłn con una joven cuando aĂşn vivĂa en PerĂş y el descubrimiento final que revela una faceta distinta de su tutor. Con el mismo talante se desarrollan las historias “La ola”, de Liliana Colanzi, y “Flores en las ventanas”, de Joseph Avski. Ambos cuentos, desde distintas facetas del realismo, tocan esperanzas, sinsabores y fracasos relacionados con la vida acadĂ©mica.
Más allá de las virtudes y yerros de la selecciĂłn, me parece que Casa de locos es un primer intento valioso por reunir la narrativa en español que se escribe en Estados Unidos. Como comentĂ© al comienzo de esta nota, desde hace tiempo hay una migraciĂłn constante de escritores latinoamericanos a ese paĂs, ya sea para estudiar o para impartir cátedra o conferencias. Sin embargo, el contexto de su creaciĂłn raras veces parte desde el papel del migrante. Otro factor digno de tomarse en cuenta es que tales obras tienen muy poca repercusiĂłn en el extranjero aunque sean traducidas. El escritor latinoamericano, para ser tomado en cuenta, necesita asimilarse con su entorno, escribir en inglĂ©s y buscar desde ahĂ a los editores que lo “descubran”. A contracorriente de este fenĂłmeno, tenemos nuevas generaciones de escritores que, ya sean reciĂ©n llegados o miembros de familias hispanas asentadas en Estados Unidos, conservan el interĂ©s en el castellano no sĂłlo como lengua cotidiana sino como medio de expresiĂłn artĂstica. El segmento acadĂ©mico que participa en Casa de locos es otro buen sĂntoma de la vitalidad que posee su lengua materna en norteamĂ©rica. Poco a poco, y no con pocas dificultades, los lectores en español van encontrando textos literarios que, además de abordar la problemática de la minorĂa latinoamericana, son una reflexiĂłn necesaria sobre su papel en Estados Unidos.
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